El proyecto se basa en la idea de obtener fibras textiles a partir de subproductos agrícolas de cáñamo.
En los últimos años, el cultivo de cáñamo industrial (no textil) ha aumentado a Europa de manera espectacular debido, principalmente, a su utilidad para la extracción aceites y otras aplicaciones de alto valor por la alimentación humana y por sus aplicaciones médicas, principalmente los CBD. La cañamiza y las fibras son subproductos, este último con demasiada lignina para textiles.
Por otra parte, también puede ser de interés cultivar cáñamo textil para obtener fibras, aunque en este caso, se pierde la potencialidad económica de la explotación de las semillas. Así, por un uso dual del cáñamo, una vez hecha la extracción de los constituyentes de las semillas, el residuo que queda puede ser tratado para obtener fibras textiles. Se trata de una fibra no tratada en el campo (enriado) y que presenta mucha materia no celulósica que impide su hilatura. El proceso ya desarrollado por el grupo de investigación para obtener hilos de los subproductos del cáñamo consiste en procesos mecánicos, químicos y/o químicos-enzimáticos que prepara la fibra para su mezcla posterior con otras fibras. Se han obtenido hilos de 40 tex de título con mezclas 20/80, 40/60 y 50/50 de cáñamo/algodón con hilatura OpenEnd Rotor.